La vida nos depara por momentos curiosas historias, la de Pequeño Salto Mortal es la de cinco amigos que siempre han tenido una devoción total por la música pero que por cosas del destino nunca habían podido tocar los cinco juntos, siempre lo habían hecho en combos sueltos por diferentes bandas pero no es hasta 2021 cuando Guillermo, Domingo, Carlos, Pedro y José se unen para crear un proyecto conjunto.
De ese amor y respeto por la música nace Pequeño Salto Mortal, quienes desde hoy son nuevo miembro de la familia MusicHunters. Desde Sevilla nos abordan de una manera directa con canciones llenas de mensajes directos y con una propuesta musical elegante pero a la vez enérgica. Una elegancia que va más allá de la propuesta musical, ya que llega hasta sus portadas e imagen como banda.
Una mezcla explosiva para una formación que pese a ser ya veterana en esto de la música la sigue sintiendo y disfrutando con la ilusión de un quinceañero.
“Rock”, o “rock and roll”, entendido como crisol de estilos musicales de raíz americana y su derivada británica; “de canciones” porque éstas tienen todo el protagonismo. Sin artificios ni extravagancias Pequeño Salto Mortal llega para que caigamos rendidos ante su contundente propuesta musical.
Hasta el momento hemos podido disfrutar de tres adelantos que llegarán en el su próximo trabajo. Un trabajo que se ha ido fraguando muy lentamente en los hornos de Estudio 335. En Tarde o Temprano, El Nublado de Madrid y Sálvame descubrimos una evolución en la manera de afrontar las canciones de la banda sevillana. Singles más íntimos y cargados de elementos de la Americana Music que dan contraste a sus primeras canciones y que nos ayudan a crear el mapa sonoro de la banda sevillana.
Han publicado, además, un single de doble cara titulado “Queridísimo Bob Dylan” en homenaje al reciente ganador del premio Nobel, adaptando dos de sus canciones al español que dejan bien a las claras el carácter camaleónico de la banda, capaz de poder llegar a casi cualquier registro.
